Recomposición del Congreso podría influir en las votaciones del fiscal y el TC

La bancada de Keiko Fujimori afronta la rebeldía de 10 de sus miembros. Por Twitter, ella se dirigió a sus 61 congresistas, cuando en teoría tiene 71.

Duro revés. Fuerza Popular afronta la disidencia de 10 de sus integrantes, liderados por Kenji Fujimori, y la bancada oficialista busca acercarse a APP y Nuevo Perú. El fujimorismo disminuido la tendrá más difícil a la hora de juntar los votos necesarios para destituir al titular del Ministerio Público.

Redacción: Liliana Rojas, Ghiovani Hinojosa.

La votación de la vacancia presidencial ha dejado varios "heridos" en el Parlamento y ha iniciado un proceso de recomposición de fuerzas políticas. Algunos observadores coinciden en que esto dificulta el camino a la destitución del fiscal de la Nación, Pablo Sánchez, y a la sanción de los magistrados del Tribunal Constitucional.

Ha quedado claro que los 10 miembros de Fuerza Popular, liderados por Kenji Fujimori, que se abstuvieron de vacar a Pedro Pablo Kuczynski podrían volver a desobedecer las órdenes de Keiko en determinadas circunstancias. El mismo día de la votación, la bancada acordó someterlos a un proceso disciplinario.

“Si los expulsan o si ellos renuncian no podrían formar una nueva bancada, una ley se los impide, a menos que en un proceso realizado por un órgano del propio Congreso se demuestre que fueron sacados de forma arbitraria y violando el debido proceso”, explica Heber Campos, profesor de Derecho de la Universidad Católica del Perú.

Como no agrupados, los “kenjistas” podrían formar una bancada de facto, aunque sin las prerrogativas de un grupo parlamentario. Este bloque “tendría más votos que Acción Popular (5 miembros), el Apra (5 miembros) y Alianza para el Progreso (8 miembros, luego de la renuncia de Julio Rosas)”, remarca el politólogo Fernando Tuesta.

Para el ex presidente del Parlamento Ántero Flores-Aráoz, esta podría ser la primera de varias escisiones en la bancada naranja. “La historia lo demuestra: cuando se rompe la unidad una vez, los quiebres vuelven a repetirse”, comenta.

Las bancadas de Alianza para el Progreso y Nuevo Perú, que no se plegaron a la moción de vacancia (la primera, votando en ámbar, salvo dos de sus miembros; y la segunda, retirándose en bloque del hemiciclo), se yerguen como potenciales aliados de Peruanos por el Kambio. Lo ha dicho el congresista Juan Sheput, vocero alterno de la bancada oficialista, a La República: “Hay que diseñar una política de alianzas con aquellos partidos que han demostrado tener interés por la gobernabilidad”.

Y luego están las discrepancias en las bancadas pequeñas, como el Apra y Acción Popular. En la primera, Jorge del Castillo y Luciana León mostraron ser capaces de votar contra de lo dispuesto por el Comité Ejecutivo Nacional. Y en la segunda, Víctor Andrés García Belaunde se ha mostrado incapaz de persuadir a los suyos de que su posición es la justa.

SIN MAYORÍA ABSOLUTA

¿Cuáles son los efectos de esta recomposición sobre la práctica parlamentaria?

El politólogo Eduardo Dargent piensa que “el fujimorismo disminuido en 10 miembros, con sólo 61, es menos atemorizante en lo que respecta a vacancias a futuro, interpelaciones y censuras”.

Sin los “kenjistas”, los miembros de Fuerza Popular serían 61 y no alcanzarían la mayoría absoluta (66 votos, de 130 congresistas) necesaria para aprobar nuevas leyes orgánicas o sus modificaciones, delegaciones de facultades al Ejecutivo, interpelaciones a ministros, conformación de comisiones investigadoras, entre otras medidas relevantes.

Para Flores-Aráoz, esto hará que el fujimorismo abandone su ostracismo y se acerque a otras bancadas a tender puentes.

Añadió que con la nueva correlación de fuerzas habría cambios en la conformación de las comisiones y esto podría influir en la elección del próximo presidente del Congreso.

Dargent añade que es importante saber cuál será el plan inmediato de Kenji Fujimori: si disputará el liderazgo de Fuerza Popular, armará un movimiento propio o se quedará en el partido “dejando en claro que no se va a dejar mangonear”.

Para la ex candidata presidencial Lourdes Flores Nano, no hay duda que el duro revés sufrido por el fujimorismo ha cambiado sustancialmente el escenario en el Poder Legislativo. Afirma que la jornada del último jueves le enseñará a Fuerza Popular que tiene que ser más tolerante y menos prepotente para evitar más fraccionamientos.

Asimismo, recomendó a Kuczynski hacerle caso a Juan Sheput y tender puentes hacia las fuerzas políticas que lo han apoyado abiertamente, como Alianza Para el Progreso y Nuevo Perú.

Esta consideración se podría tomar en cuenta a la hora de pensar en la conformación del nuevo gabinete. De hecho, algunos vocean a la parlamentaria Gloria Montenegro (APP) como futura ministra de Educación.

FISCAL SÁNCHEZ Y TC

“Definitivamente, todas las votaciones que se van a realizar inmediatamente después ya van a estar sometidas a este nuevo reordenamiento de las fuerzas en el Congreso”, remarca el analista político Fernando Tuesta.

Dos de las votaciones más relevantes que se realizarán en las próximas semanas son la destitución del fiscal de la Nación, Pablo Sánchez Velarde, y la sanción contra cuatro magistrados del Tribunal Constitucional por el caso El Frontón: para uno de ellos (Eloy Espinosa-Saldaña) se pide la inhabilitación por 10 años y para los otros tres (Manuel Miranda, Marianella Ledesma y Carlos Ramos) una suspensión por 30 días.

En ambos casos, antes de la votación final en el Pleno, las sanciones deben aprobarse primero en la Comisión Permanente, integrada por 26 congresistas.

De acuerdo al Reglamento del Parlamento, para que el Pleno dé luz verde a las sanciones tanto para el titular del Ministerio Público como para los jueces del TC se necesita 69 votos. Es la cifra correspondiente a los dos tercios del total de parlamentarios menos los integrantes de la Comisión Permanente, como corresponde en el proceso de este tipo de acusaciones.

Se debe recalcar que en estas sesiones plenarias no podrán participar aquellos que votaron la denuncia en la Comisión Permanente, por lo que todos los grupos parlamentarios llegarán ligeramente disminuidos a la votación.

Por ejemplo, Fuerza Popular, que necesitaría 13 votos para asegurar la aprobación de la acusación en la Comisión Permanente, podría llegar con 58 votos al momento clave en el Pleno. Ahora, si los "kenjistas" vuelven a disentir, serían 48.

En tal caso, faltaría convencer a otros 21 parlamentarios para sacar adelante la sanción contra el fiscal Sánchez.

Los oficialistas también llegarían algo reducidos: gastando los votos de los cuatro representantes que tienen en la Comisión Permanente (entre ellos Vicente Zeballos y Salvador Heresi), se presentarían en la sesión plenaria con 14 votos.

Lo mismo pasaría con APP, que tiene 3 votos en la Permanente; y con el Apra, que tiene solo 2.

"Si hasta el 12 de enero, cuando empieza el receso en el Congreso, la Comisión Permanente no aprueba las sanciones contra el fiscal de la Nación y los miembros del TC, ya se tendría que ver a partir del marzo, cuando se instale la segunda legislatura de este periodo parlamentario", explica Heber Campos.

EL CASO DE BENICIO RÍOS EL PEPECISTA QUE VOTÓ NARANJA

- Uno de los apepistas que se rebeló a la consigna del partido de César Acuña y se plegó al fujimorismo en la vacancia de PPK fue Benicio Ríos Ocsa, parlamentario por Cusco.

- De acuerdo a fuentes de APP, Ríos tomó esa decisión en busca del apoyo de Fuerza Popular en un inminente proceso de levantamiento de inmunidad parlamentaria que pesa sobre él.

- El congresista fue sentenciado hace pocos días, el 18 de diciembre, a siete años de cárcel por el delito de colusión debido a la compra sobrevalorada de 10 hectáreas de terreno cuando era alcalde provincial de Urubamba. Lo condenó el Cuarto Juzgado Penal Unipersonal de Cusco.

- “Vamos a esperar que Benicio Ríos nos dé una explicación lógica de por qué hizo eso y después veremos lo que corresponde porque tampoco vamos a abrir un proceso sin escucharlo”, ha declarado César Villanueva, vocero de APP.

- Otro de los que votó con Fuerza Popular fue Julio Rosas, que ha renunciado a la bancada.