Empresario sampablino construye el primer restaurante campestre en Contumazá

 

El restaurante es ejecutado, desde hace cinco meses, en un terreno que tiene una extensión de dos hectáreas. Parte de los trabajos son hechos con materiales rústicos y tendrá áreas de esparcimiento, entre ellas una canchita deportiva y una piscina. Se proyecta construir, además, habitaciones para brindar hospedaje a los clientes y turistas que desean descansar lejos del mundanal ruido. 

 

El empresario Leo Martín Moza Chilón, estudió gastronomía en Cajamarca.

El empresario sampablino, Leo Martín Moza Chilón, está construyendo el primer restaurante campestre de Contumazá. La obra es ejecutada a sólo quince minutos de la ciudad, a espaldas del estadio municipal, desde donde se puede apreciar tanto la zona urbana como el agreste y hermoso paisaje contumacino.

La obra es ejecutada, desde hace cinco meses, en un terreno que tiene una extensión de dos hectáreas. Parte de los trabajos son hechos con materiales rústicos y tendrá áreas de esparcimiento, entre ellas una canchita deportiva y una piscina. Se proyecta construir, además, habitaciones para brindar hospedaje a los clientes y turistas que desean descansar lejos del mundanal ruido.

“Me animé a construir un restaurante campestre en Contumazá, porque hay gente que busca degustar platos típicos de esta provincia y de la región en contacto con la naturaleza, fuera de la ciudad. Soy chef profesional y cuento con personal idóneo para preparar las comidas que la gente del lugar y los turistas deseen. Además prepararemos los platos que la gente quiera saborear solo llamando a nuestro teléfono. También atenderemos banquetes de matrimonios, quinceañeros y bautismos”, informó el empresario muy entusiasmado mientras supervisaba la construcción del restaurante.

Leo Martín  moza Chilón, nació en la provincia de San Pablo. Estudió gastronomía en Cajamarca y radica en  la ciudad de Contumazá, desde hace cinco años, de donde es su esposa e hijos. Es dueño de Pollos a la Brasa “Leo”, negocio que está ubicado en el centro de la ciudad y, por su buena sazón y excelente atención al público, es considerado como una de las mejores pollerías de la región.