Por: Luis
Eloy Plasencia Torres:
Existe
la posibilidad de que los partidos y movimientos políticos de izquierda se unan
con fuerzas políticas progresistas y presenten un candidato que pueda ganar la
Presidencia de la República en las elecciones generales que se llevarán a cabo
en el próximo año.
Históricamente,
esa izquierda –hecha jirones por la falta de un líder con la capacidad de
aglutinar las fuerzas políticas contestarías al sistema neoliberal que nos
gobierna- tiende a juntarse en torno a líderes que esgrimen ideas patrióticas y
revolucionarias.
Lo
hizo con Alfonso Barrantes Lingán quien, 1980, fundó Izquierda Unida, frente
que unió a los diversos grupos de izquierda peruanos. Barrantes con la
izquierda cohesionada fue elegido Alcalde Metropolitano de Lima en las
elecciones de 1983. Y, en las elecciones presidenciales de 1985, estuvo a punto
de ser Presidente de la República, pero prefirió no ir a una segunda vuelta y
le dio el triunfo al aprista Alan García Pérez, decisión errada que causó la
desunión de la izquierda peruana.
Hoy
– en que una corriente de socialismo moderno gobierna y se extiende en algunos
países de Latinoamérica- el escenario pre electoral se presenta propicio para
que la izquierda tenga una participación exitosa en las elecciones
presidenciales del año 2016.
Actualmente,
no tenemos un país dolido aún por los golpes de la macabra dictadura de
Fujimori que nos oprimió durante 10 años, no. Por lo tanto ya no necesitamos al
Pachacútec redentor -que personificó Alejandro Toledo- quien resultó ser un
Felipillo del imperio norteamericano y es investigado por actos de corrupción.
Tampoco necesitamos al militar rebelde y “democrático”-Ollanta Humala- quien
para ser Presidente firmó un pacto con los ricos y traicionó al pueblo que lo
llevó al poder.
Hoy
la coyuntura -política, social y económica- es distinta. A víspera de nuevas
elecciones generales, de acuerdo al reporte de marzo de la Defensoría del
Pueblo, hay 155 conflictos sociales activos y el 74,1% corresponde a problemas
de corte socioambiental, en los que la población rechaza a la contaminación
generada por empresas nacionales y transnacionales a las que el Gobierno les ha
dado en concesión gran parte del territorio peruano para que exploten minerales
e hidrocarburos, incluso en cabeceras de cuenca contraviniendo la Constitución
Política y acuerdos internacionales.
Pero
también hay protestas multitudinarias en rechazo a leyes laborales que
atropellan los derechos de jóvenes y docentes.
Y
la respuesta del Gobierno es brutal y sangrienta, aún se escucha el llanto de
la madre del ex Presidente regional de Cajamarca, Gregorio Santos Guerrero,
encarcelado por identificarse con la lucha de su pueblo en defensa del agua y
el medio ambiente. También se oye llorar y clamar justicia a los familiares de
varios peruanos heridos o asesinados por oponerse a proyectos mineros o
petroleros de empresas transnacionales que amenazan con destruir colchones
acuíferos y contaminar el agua y terrenos agrícolas.
Amnistía
Internacional (AI) en su su informe anual 2014/15 sobre la situación de los
derechos humanos en el mundo, denunció que durante el 2014 hubo un “excesivo
uso de la fuerza” en las protestas sociales en el Perú. Hizo un llamado de
atención sobre el gran número de civiles y policías heridos, además de nueve
personas fallecidas durante el enfrentamiento entre las fuerzas del orden y
manifestantes.
De
otro lado los candidatos presidenciales de los partidos de derecha se muestran
condescendientes con el sistema político que con violencia mantiene al país en
el subdesarrollo y la pobreza para beneficiar a un grupito de empresarios. Por
ello y por corruptos han perdido la confianza del pueblo peruano.
La
Nación quiere cambios: Exige respeto a la vida y a los derechos de todos los
peruanos. Quiere un gobierno que defienda la soberanía nacional y proteja a los
recursos naturales del país. Anhela paz, trabajo y justicia social. No desea
volver a los años de terror que fueron originados por la aplicación de
políticas neoliberales y a reacciones violentas de grupos subversivos, tampoco
a dictaduras porque significan dolor y atraso para el Perú.
Estamos
cansados de los mismos candidatos –Alan García, Alejandro Toledo, Keiko
Fujimori, PPK- porque de una u otra forma ya han gobernado y traicionado a las
esperanzas que en ellos depositó la Nación.
De
allí que consideramos que es propicia esta coyuntura pre electoral para que la
izquierda peruana se reagrupe y refuerce con partidos políticos progresistas
con el fin de derrocar democráticamente a la derecha y sentar las bases de una
Patria libre, justa y desarrollada, tal y como lo están haciendo Bolivia,
Ecuador, Venezuela y otros países hermanos de este continente.
¡Partidos
políticos de izquierda uníos!
No hay comentarios:
Publicar un comentario
PUBLICAR DESDE FACEBOOK
Sube un poco la página, para publicar con tu cuenta de FACEBOOK.
PUBLICAR DESDE GOOGLE
Si quieres que aparezca tu nombre:
Da click al lado de "Comentar como:" y selecciona Nombre/URL a continuación coloca tu nombre; el campo de URL lo puedes obviar, da click en continuar.
Luego escribe tu comentario.