Escribe: Luis Eloy Plasencia Torres
20
proyectos presentados al Congreso, por el Poder Ejecutivo, duermen el sueño de
los justos, mientras los parlamentarios opositores, críos de partidos endebles
y serviles al poder económico, no cesan de borronear la Constitución Política
-ley de leyes- con el fin de entornillarse en
sus curules y echar de palacio al presidente Pedro Castillo que está trabajando
por los peruanos más pobres.
Acusan
al Presidente de terrorista, de ignorante, incapaz y corrupto. En noviembre del
año pasado, la legisladora Patricia Chirinos -alentada por parlamentarios fujimoristas y de otras
tiendas políticas de la extrema derecha- presentó una moción de vacancia contra
el presidente Pedro Castillo, la cual fue rechazada por burda y, sobre todo,
por la protesta popular que se volcó a las calles y cercó el Parlamento
Nacional.
Sin
embargo, ello no ha desanimado a los golpistas, muy por el contrario, los ha
puesto histéricos y violentos, al extremo de que, el 1º de febrero del año en
curso, un grupo de políticos, entre los que se encuentran aquellos que apoyaron
la teoría del fraude electoral, presentaron al Congreso una denuncia
constitucional contra el mandatario por presunta traición a la patria y otras
infracciones a la Constitución.
Además,
la bancada del Partido Morado ha presentado un proyecto con el fin de ampliar
las causales por las cuales un gobernante puede ser acusado durante su mandato,
para permitir que pueda ser denunciado por la presunta comisión de delitos de
corrupción y organización criminal.
¿Por qué
ese afán de desaparecer del escenario político al profesor Pedro Castillo
Terrones? Simple y llanamente, por temor.
La
oposición teme que cumpla con muchas de sus promesas hechas al pueblo, entre
ellas la masificación del gas doméstico y la reducción de las tarifas
eléctricas en beneficio de los más pobres. Les aterra la instalación de una
Asamblea Constituyente para cambiar la Constitución Política del Perú, porque
se arrebataría privilegios y poder a los ricos en defensa de los intereses de
la patria, además la nueva Constitución establecería sanciones ejemplares para
los corruptos, culpables del atraso y la pobreza del Perú.
Quieren
vacar al Presidente, porque ha anunciado que revisará los contratos leoninos
que gobernantes anteriores firmaron con las grandes empresas mineras que dañan
el medio ambiente y adeudan sumas millonarias al país.
“Las 100
grandes empresas que operan en el Perú tienen compromisos con el fisco por
cerca de 30 mil millones de soles, lo que constituye una deuda histórica que
debe cobrarse en beneficio de todos los peruanos” enfatizó el presidente de la
República, Pedro Castillo, recientemente.
Sabido
es que esas empresas financian la candidatura de varios congresistas, asimismo pagan
jugosas prebendas a los grandes medios de comunicación y también a jueces y
fiscales venales. Por ello, los funcionarios públicos corruptos y la prensa
vendida se han convertido en defensores de intereses de los grupos de poder que
se oponen férreamente a los cambios estructurales y al desarrollo del Perú.
El
presidente de la República, acaba de juramentar su cuarto gabinete ministerial,
en siete meses como gobernante, porque para los congresistas opositores
Castillo no sabe designar ministros honestos y capaces.
Lo
curioso del caso es que gran parte de ellos -los congresistas “fiscalizadores”-
tiene procesos judiciales en su contra, por haber cometido delitos, signados de crimen y corrupción.
Como
podemos ver, los defensores del sistema político injusto con el que se gobierna
el país y la prensa mercenaria no tienen
bandera. Continúan con sus prácticas antidemocráticas y manipuladoras con la
intención acrecentar el clima de ingobernabilidad e inseguridad ciudadana.
¡Quieren
que el Presidente renuncie para tomar las riendas del gobierno y seguir en lo
mismo!
Sin
embargo, Pedro Castillo Terrones, ha dicho que jamás renunciará, porque al hacerlo
estaría traicionando a la voluntad popular. Muy por el contrario, defiende su
gobierno a pie firme pese a los ataques y amenazas constantes que recibe de la
oposición.
“Invoco
al Congreso de la República a priorizar los más de 20 proyectos que tienen en
su Mesa Directiva, que durante estos últimos meses hemos remitido desde el
Ejecutivo, entre ellos el referido a la masificación del gas, la creación del Ministerio
de Ciencia, Tecnología e Investigación, el conjunto de proyectos anticorrupción
y el proyecto que regula adecuadamente la vacancia y la cuestión de confianza”,
expresó el Mandatario en mensaje a la nación.
Además,
representantes del Ministerio de Salud, han informado que más del 80 por ciento de
la población, ha sido vacunada contra la pandemia COVID-19, de manera que la
curva de contagios está descendiendo a nivel nacional. Un logro importante del
gobierno del presidente Castillo que ha sido reconocido por organizaciones y
países extranjeros.
Cabe
resaltar el éxito del gobierno de Pedro Castillo en el aspecto económico. El
exministro Pedro Francke, ha manifestado que en su gestión hubo un crecimiento
de la economía del país en 13% el año pasado, el más alto en Latinoamérica, y
un déficit fiscal de 2,6% del PBI, uno de los más bajos, mientras se reporta
récord en la inversión pública el 2021, ascendente a S/ 39 mil millones.
También
destacó algunas propuestas del Presidente, como la segunda reforma agraria, y
la reforma tributaria con la idea de un impuesto especial a la minería para
fortalecer los sectores de Educación y Salud.
Nos
preguntamos, ¿por qué los golpistas no hablan y debaten sobre las propuestas y
avances del gobierno de Pedro Castillo?
Desde
esta tribuna, demandamos a la oposición congresal que renuncie a su proyecto
golpista y acepte, con hidalguía, su derrota electoral.
Asimismo,
les invocamos que dejen gobernar al Presidente y sumen fuerzas para resolver
los graves problemas que afectan a la mayoría de los peruanos, como el
desempleo, la pobreza, el hambre, la delincuencia común, la corrupción de
funcionarios. Hay mucho que hacer por la educación, la salud, la agricultura y los
trabajadores.
Los peruanos, efectivamente, vivimos en un país rico en recursos naturales y merecemos vivir con dignidad. No se debe permitir que un grupito de congresistas continúe borroneando la Constitución y elaborando leguleyadas con la intención de vacar al Presidente. Ello es ilegal, inmoral y antidemocrático.
Así lo entiende nuestro pueblo, de allí que está pendiente de todas las componendas de la ultraderecha para vacar al Presidente. Y, a través de sus organizaciones más representativas, acaba de anunciar insurgencia nacional durante los días 6, 7 y 8 del presente mes para exigir el cierre del Congreso de la República y la convocatoria de una Asamblea Constituyente que redacte una nueva Constitución Política.
Cuidado congresistas golpistas, el Pueblo Peruano ha tomado conciencia de sus derechos y ya no se dejará engañar con sus leyes ambiguas y antidemocráticas, tampoco con las mentiras insolentes de la prensa mercenaria. Si vacan al Presidente, ustedes también tendrán que irse, porque el Congreso no es su casa como lo ha manifestado su eventual y desubicada presidenta.
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